2. El salomonismo en la corte de los Países Bajos (1549-51)

Carlos V derrotó en 1544 al rey de Francia, en 1545 hizo las paces con los turcos y en 1547 derrotó a los luteranos alemanes en Mühlberg. En 1546 había muerto Martín Lutero, el líder protestante, y poco después, en 1547, murieron Enrique VIII de Inglaterra y Francisco I de Francia.

Aprovechando este periodo de paz y de vacío de poder entre sus antagonistas hizo llamar a su hijo desde Bruselas para prepararle para el nuevo escenario político y para tomar contacto con los que habrían de ser sus estados del norte, ya que el Emperador decidió separar los Países Bajos del Imperio y ligarlos a la Corona Española.

2.1. La primera estancia del príncipe Felipe en los Países Bajos

Carlos V y su joven heredero fueron recibidos entre grandes festejos, con las ciudades desplegando sus mejores galas. Al príncipe le encantaría la tierra de su padre, especialmente sus cuidados jardines y sus torres adornadas de esbeltos chapiteles de pizarra, que introduciría con éxito en España a su vuelta. Se enamoraría también de la pintura y música flamenca, y del esplendor de la vieja corte borgoñona y sus fiestas.

Antes de llegar a Flandes, pudo cultivar su interés artístico en Génova, Milán, Trento, Baviera y Renania. Precisamente en Milán, de donde Felipe era ya duque y señor desde septiembre de 1546, pudo conocer a Tiziano, Leone Leoni y Jacopo da Trezzo, que tanto tendrían que decir en la decoración de El Escorial [60]. El conocido como «felicísimo viaje» le llevó hasta Flandes, donde príncipe Felipe se reencontró con su padre después de seis años. Allí cumpli­ría poco después los 22 años, permaneciendo en los Países Bajos hasta los 32, con cortos períodos de tiempo intermedios en Inglaterra, Alemania y España [61].

[60] H. Kamen (Enigma, pág. 20) señaló la capacidad que adquirió Felipe de coexistir con los príncipes luteranos alemanes, como Mauricio de Sajonia, el principal aliado del Emperador, por lo que algunos europeos como el cardenal inglés Reginald Pole lo consideraron como continuador de las políticas pacificadoras de su padre.
[61] «De los dieciséis años transcurridos desde el momento en que comenzara a ocuparse de los asuntos de España, en 1543, ocho los había pasado fuera del país» (ibídem, pág. 45).

Grabado del príncipe Felipe de España de Cornelis Anthonisz (1543, Rijksmuseum)

2.2. Los «gitones» del príncipe, trasmisores de su nueva imagen

En la etiqueta borgoñona, adoptada por la Corte del príncipe Felipe en 1548, era muy habitual acuñar gitones que se arrojaban al público en las apariciones públicas de los príncipes, siendo ésta la manera de trasmitir la imagen –tanto física como simbólica– de los personajes reales. Al pueblo le gustaba guardarlos porque los usaban para tantear, como un rudimentario ábaco [62].

Durante el felicísimo viaje el uso de gitones fue fundamental para divulgar la imagen del príncipe Felipe como futuro soberano de los neerlandeses. Para ello se realizó un importante cambio en su emblemática, como puede comprobarse en las empresas propuestas por Gabriel Rincón [63]. Según palabras del mismo Rincón, el príncipe había utilizado como divisa hasta entonces el escudo de sus armas reales.

En los actos de juramento de Felipe ante cada uno de los estados se lanzaron al pueblo nuevos diseños de oro y plata, iguales que las monedas de cuenta en bronce. Inspirados en una medalla de los Leoni de 1549, reproducían el busto de Felipe con armadura y ya con barba en el anverso y en el reverso al joven Hércules, entre la virtud y el vicio. Por entonces se comparaba al príncipe con esta figura mitológica, otra vez con simbología sucesoria: un Hércules barbado, vestido con la piel del león de Nemea, carga con la bóveda celeste para que «Atlas repose» («Vtquiescat Atlas»).

[62] El «gitón» o «getón» (del fr. jeton, ficha) era una especie de moneda, ficha o chapa de cobre, sin valor determinado, que se usaba habitualmente para llevar la contabilidad en el «Bureo de Su Magestad», la oficina de administración palaciega en tiempos de los Austrias.
[63] Debo esta comunicación y la explicación del uso de los gitones a José Luis Gonzalo: «Rincón pudo realizar los diseños de estas "divisas" hacia 1548, o en los años inmediatamente posteriores, ya que engarzan de manera muy clara con el ambiente mesiánico que rodeó el "Felicísimo viaje" [...] El Sol es el motivo principal de las tres divisas ideadas por este artista cortesano, quizás un artesano del metal o acuñador [...] No parece ocioso señalar que Rincón expresa y traduce con sus divisas tanto las ideas como comentarios que ya circulaban por la Casa del Príncipe». El texto está extraído de la «Declaracion de las Diuisas de los Gitones por Gabriel Rincón», en Papeles varios. Copia de un códice de El Escorial que fue de Ambrosio de Morales, BNM, Mss. 5.938, ff. 439r-441v, cit. por J. L. Gonzalo, «Imagen salomónica», pág. 738. El autor cree que la imagen filipina pasó por tres periodos en esta época: una primera en que se le comparaba con el Sol, para que el pueblo conozca la imagen barbada de su próximo soberano, tras el «felicissimo viaje» opta por el sabio Salomón como heredero del belicoso David, preparando al pueblo para la abdicación de Carlos V, y tras su viaje a Inglaterra se decanta por la comparación con el Salomón constructor, donde se introduce el concepto de la restauración del Templo como imagen de la unidad perdida de la Iglesia.

Hacia 1552 Rincón propondría el uso del Sol para las nuevas divisas del príncipe, manteniendo la misma estética, pero comparando a Felipe con Salomón para justificar esta simbología: «El real Profeta Davith quando quiso demandar à Dios que constituyese a su hijo Salomón en Rey de Israel, con el salmo setenta y uno se lo pedia; y aunque en el sentido espiritual se entienden grandes misterios, en el literal manifiesta las grandezas y magnificencias que su hijo había de tener».

2.3. Bruselas (1.04.1549): Felipe, «vos soys el prudente Salomon»

Entre los numerosos festejos que se realizaron en honor al hijo del Emperador, que no olvidemos era de Gante, el cronista Calvete de Estrella –maestro del príncipe y convencido erasmista– destacó los arcos triunfales y los «tableaux vivants» elaborados por las Chambres de Rhéttorique [64]. Estas cofradías municipales, con una fuerte motivación competidora, estaban financiadas por los gremios artesanales y comerciales locales y por las naciones extranjeras.

[64] J. C. Calvete, Felicísimo viaje. Estos cuatro gruesos volúmenes se complementan muy bien con la crónica de V. Alvares, Relación. Para los comentarios de los eventos artísticos del viaje véase F. J. Pizarro, Arte y espectáculo. Para el erasmismo de Calvete, véase J. L. Gonzalo, Erasmismo.
Cornelio Schryver (Cornelius Scribonus Grapheus), Le triumphe d'Anvers, faict en la susception du Prince Philips, 1549. El secretario del Senado de Amberes se centra en los veintitrés arcos triunfales que se pudieron contemplar en la entrada del príncipe Felipe en la ciudad.

Estos espectáculos de origen medieval, auténticas representaciones teatrales al aire libre, estaban muy arraigados en los Países Bajos. Los escenarios («máquinas teatrales» los llama algún cronista) podían estructurarse en uno o varios huecos flanqueados por columnas y elevados sobre un pedestal, que a veces era un completo arco de triunfo clásico, verdaderas maravillas de la arquitectura efímera que se montaban sólo para ese acto concreto.

Los denominados «cuadros» se componían con actores –estáticos o en movimiento– representando temas bíblicos, históricos o legendarios, y tenían inscripciones explicativas, generalmente en latín. Los eventos artísticos cumplían también una importante función política, destacando el carácter sucesorio de los actos que se estaban celebrando y sirviendo de embajada del poder español.

El príncipe llegó a Bruselas el 1 de abril de 1549 donde disfrutó de la primera «entrada jovial» («Joyeuse Entrée») de sus futuros súbditos neerlandeses. Allí, dentro de un monumento erigido en la calle, unos personajes «vestidos con insignias Hebraicas» representaban a Salomón coronado rey con el consentimiento de su padre, a los que se compara directamente con Carlos V y Felipe, en una impresionante –para lo que vendría décadas después– muestra de lealtad:

«Dentro de la quadra estauan personajes biuos vestidos de insignias Hebraycas, que representauan como Salomón era coronado por Rey de Isrrael por consentimiento d’el Rey Dauid su padre, los versos que allí auia eran, los siguientes:

TV SALOMON PRVDENS, IVSTO QVI PATRE IVBENTE CVM POPVLI PLAVSV DEBITA SCEPTRA REGES. Vos soys el prudente Salomon, que por mandado de vuestro justo Padre gouernareiys los reynos, que os pertenecen con grandissimo contentamiento de los pueblos» [65].

[65] J. C. Calvete, Felicíssimo viaje, pág. 65v.
1 de marzo 1549, catorce años antes de la colocación de la primera piedra en El Escorial, Felipe ya es el prudente Salomón. Ese sería su sobrenombre para la historia.

2.4. Sobre la prudencia y la sabiduría

Ha sido tan temprano este encuentro con Salomón que merece un comentario aparte. El párrafo incluye algunas ideas, expresadas por primera vez, que se repetirán posteriormente en otros importantes episodios en Flandes e Inglaterra: lealtad de su pueblo, derecho de posesión de los Estados, sucesión voluntaria en vida y prudencia en el gobierno. Veremos a continuación cómo fue una constante en este viaje y en la década de 1549-1559, hasta su culminación en la idea de El Escorial y en la imagen de Felipe como un nuevo «prudente Salomón». Tanto que se convertiría en el apodo del rey Felipe II, el «Prudente».

La Biblia nos cuenta cómo, recién comenzado su mandato, Salomón pidió a Dios virtudes para gobernar. Pero no pidió larga vida, riquezas, o la muerte de sus enemigos, sino discernimiento y buen juicio («perspicacia para atender al derecho» dice otra traducción): «Concede, pues, a tu siervo un corazón prudente para gobernar a tu pueblo y poder discernir entre lo bueno y lo malo. Porque, ¿quién si no podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?» (I Re 3, 9). La prudencia es, según la definición de Platón y Aristóteles, una virtud eminentemente política y moral, relacionada con el bien común. Aristóteles precisó que era una virtud «activa» (En VI, 5, 1140b 5). La Biblia la empareja con la sabiduría: «Yo, la Sabiduría, habito con la Prudencia, yo he inventado la ciencia de la reflexión» (Pr 8,12,14), señalando la importancia de ser un buen gobernante y un buen cristiano.

Naturalmente, la prudencia que pide Salomón no es sólo «templanza, cautela, moderación» (segunda acepción del Diccionario de la Real Academia, seguramente la más usada en el español moderno), sino la primera acepción «una de las cuatro virtudes cardinales [prudencia, justicia, fortaleza y templanza], que consiste en discernir y distinguir lo que es bueno o malo, para seguirlo o huir de ello», o la tercera, «sensatez, buen juicio». El célebre caso de las dos madres y el niño que Salomón propuso partir en dos era un buen ejemplo de prudencia.

El Catecismo Católico moderno lo define así: «¿Qué es la prudencia? Prudencia es la virtud que nos inclina a escoger rectamente los medios de obrar bien, dirigiendo nuestras acciones hacia la eterna salvación. La prudencia, en el cristiano, ordena el entendimiento para elegir y adoptar en cada circunstancia los medios adecuados para obrar bien al último fin» [66].

El primer diccionario de lengua castellana, el Tesoro de Covarrubias, de 1611, también insiste en la sabiduría del prudente: «Prudencia: Latine prudentia, est rerum expendarum fugiendarumque scienctia. Es una de las virtudes cardinales. Prudente, el hombre sabio y reportado, que pesa todas las cosas con mucho acuerdo» [67]. Como vemos Salomón fue más prudente que sabio. La prudencia es un concepto moral y de buen gobierno, propia de personas de gran sabiduría, por lo que ambos conceptos pueden llegar a confundirse.

[66 Catecismo Cristiano, págs. 180-182, 1962. Una versión más moderna (Catecismo Católico) añade «La prudencia es la regla recta de la acción, escribe Tomás (S.Th. 2-2, 47, 2), siguiendo a Aristóteles. No se confunde ni con la timidez o el temor, ni con la doblez o la disimulación. Es llamada auriga virtutum: conduce las otras virtudes indicándoles regla y medida. Es la prudencia quien guía directamente el juicio de conciencia. El hombre prudente decide y ordena su conducta según este juicio. Gracias a esta virtud aplicamos sin error los principios morales a los casos particulares y superamos las dudas sobre el bien que debemos hacer y el mal que debemos evitar.»
[67] El Tesoro también se hace eco del salomonismo: «y de la escoria sabe Dios hazer lo que en valor excede al oro y plata y perlas, pues todo esto es escoria para la grandeza deste segundo templo de Salomon, mausoleo celebrado más que el Caria, por uno de los milagros del mundo» (fol. 370v).
El juicio de Salomón (1694 ca., Museo del Prado, originalmente en el Palacio del Buen Retiro). Luca Giordano repitió en óleo sobre lienzo la imagen del fresco del coro de la basílica del Escorial.

2.5. No sería la única. El resto del viaje por los Países Bajos

¿Fue esta llamada a tomar como modelo a Salomón y su prudencia a cambio de la lealtad de sus súbditos una casualidad, o sencillamente una más de las alabanzas vacías que le hacía el pueblo para ganarse la simpatía de su señor? No, buscaban trasmitir un mensaje a Felipe (ensalzar la prudencia y pacifismo del heredero frente al belicismo del padre) y al leal pueblo flamenco (justificar la abdicación de Carlos V en su hijo).

Veremos también cómo su reiteración y sus variaciones sobre el asunto son muy significativas del ambiente erasmista, humanista y biblista que se vivía en esos momentos en los Países Bajos.

A riesgo de repetirme demasiado, voy a enumerar las comparaciones con Salomón, contando desde esta primera mención en Bruselas, aprovechando para seguir el viaje del príncipe por los Países Bajos. Destaca, por lo olvidado de estos temas en la actualidad, la gran erudición bíblica del pueblo neerlandés que tan grata debió ser a Felipe y lo reiterativo de la comparación con Salomón.

«Los arcos triunfales buscaban trasmitir un mensaje a Felipe (ensalzar la prudencia y pacifismo del heredero frente al belicismo del padre) y al leal pueblo flamenco (justificar la abdicación de Carlos V en su hijo)»

Está claro que a Felipe no le molestaba que le compararan con Salomón porque la repetición de teatros e inscripciones sobre el rey bíblico llegan a hacerse empalagosas. Al contrario, entre abril y octubre de 1949 los neerlandeses bien podrían haber cambiado este tema de alabanza si el príncipe no hubiera mostrado su satisfacción con sus comparaciones:

  • Bruselas (1.04.1549): probablemente la primera alusión directa a Felipe II como un nuevo Salomón y posiblemente también la primera vez que se le apoda «prudente».

  • Lovaina (4/7.07.1549): en esta ciudad de Brabante, al este de Brusela, se celebraba la victoria y posterior corte de cabeza de Goliat por David, del que se relata la historia completa: «con ella fue à Ierusalen, adonde con gran regozijo fue recibido delas mugeres, que de diuersas ciudades alli auia» (I Sam 17; 54). De aquí volvió a Bruselas, donde el día 11 viajó hacia Gante pasando por Termonda [68].

  • Gante (13/20.07.1549): las alusiones a Salomón en la patria chica del Emperador fueron muy destacadas por Calvete, que incluyó las inscripciones hebreas. Sobre tres arcos flanqueados por pilares toscanos actores locales representan las historias sucesorias de David con Salomón, Felipe de Macedonia y Alejandro Magno, Flavio Vespasiano y su hijo Tito, Carlomagno y Luis el Pío, y Teodorico Elsacio y su hijo Felipe. Los idiomas elegidos, latín y hebreo (que Calvete traduce) hacen pensar en la participación de l­os ju­díos de la ciudad [68].

[68] J. C. Calvete, Felicísimo viaje, págs. 84-85.
[69] Ibídem, págs. 100 y ss. Como demostración de la fuerte erudición bíblica del pueblo flamenco mostraban también al sacerdote Sadoc, fundador de la única clase sacerdotal legítima, y al profeta Natán, que profetizó la construcción del Templo y la llegada de Jesús como descendiente de David (II Sam 7:12s). También a Banayas, que sería el jefe de los ejércitos de Salomón (I Re 1:8,26 y 32): «En lo alto d'el arco se hazia una quadra, en que se representaua la historia de Salomon, como fue vngido por Rey de Isrrael por el Sacerdote Sadoc, y el Profeta Nathan con voluntad d'el Rey Dauid su padre, y abriendo las cortinas parecia el Rey David muy viejo y cano sentado en su real silla, y cabe el su hijo Salomon: y a un lado de la quadra estaua el Propheta Nathan, y el sacerdote Sadoc, y Banayas hijo de Ioiada, y muchos Principes d'el pueblo de Isrrael vestidos todos de diuersos trages y insignias Iudaycas. Al otro lado estauan muchos Caualleros y gente de guerra muy bien armados, hincauase Salomon de rodillas ante el Rey, el qual le ponia vna Real corona en la cabeça, y el sceptro en la mano con gran triunpho y son de trompetas: y lo mismo se hazia enlos otros arcos y espectaculos [...] [texto hebreo y latino] Bien sera para ti ô tierra, si tu principe fuere hijo de Nobles [...] [texto hebreo y latino] Dio yo el Señor quien se assiente en mi Silla viendolo mis ojos [texto hebreo y latino] A el mandarè que sea Capitan, El reynara despues de mi. Y encima de la puerta dela puerta de la mano derechaen persona delos Caualleros y criados d'el Rey Dauid, en letra Hebrayca dezia [texto hebreo y latino] Engrandezca el Señor tu nombre sobre el nombre de tu Padre Dauid. Encima de la puerta siniestra en persona de Banayas hijo de Ioiada, en Hebrayco dezia [texto hebreo y latino] Assi como fue el Señor Dios con mi Señor el Rey David, assi sea con Salomon, y engrandezca mas su Silla despues dela d'el Rey Dauid mi Señor.»

J. Calvete, Felicíssimo viaje. Portada, partes de un arco y letreros del de Gante

  • Brujas (21/26.07.1549): la siguiente ciudad donde Felipe recibió el juramento de sus nuevos súbditos fue Brujas. Aquí, además de representar la escena de la sucesión, se estableció explícitamente la relación entre las dos parejas de Reyes, señalando el designio divino de sus reinados, a diferencia de los de Baltasar de Babilonia, Darío de Persia y Alejandro Magno, sembrados de problemas y divisiones: «quan firmes [fueron] los Reynos de Dauid y Salomon por ser elegidos de Dios, como lo fue el Emperador don Carlos y el Principe don Phelippe su hijo» [70].

  • Ieper (Ypré, 28.07.1549): tras pasar por Vitandal y Lamberges la comitiva llegó a Ypré, donde se repite el episodio sucesorio entre David y su hijo, y su aceptación por todas las tribus de Israel, así como el Juicio de Salomón, remarcando su famosa sabiduría: «En vno de aquellos Principes señalaua al Rey, despues de auer juzgado la diferencia entre las dos mugeres, que contendian delante d'el Rey sobre declarar de qual d'ellas era el hijo conesta letra. REX SAPIENS STABILIMENTVM EST POPVLI El Rey sabio Firmeza es d'el pueblo» [71].

  • Lille (4/7.08.1549): tras su paso por Vergen, Dunquerque, Gravelinas, San Tomé, Artoes, Heras y Bethuna, el príncipe llega a Lille, donde se repite la historia: «vuestra gran Virtud me forçò a contar como Salomon fue confirmado en el Reyno de Ierusalem con mucha alegria d'el pueblo: porque assi como el Emperador yguala en piedad a Dauid su padre, assi vos siendo su hijo seguis de vuestro grado enlo Bueno y Santo las pisadas de su hijo Salomon» [72].

  • Tournai (7/9.08.1549): vuelven las comparaciones con David y Salomón, y aparece Betsabé, la madre de Salomón, convenciendo a David de que abdicara en su hijo: «hazian gran fiesta y regozijo por la coronacion d'el Rey Salomon, con diuersos instrumentos de musica. Enla quadra superior conforme à esto se representaua, como la Imperial Magestad en su vida hazia otro tanto con Don Phelippe su hijo haziendole jurar de tantos Reynos y Señorios por Principe y Señorios por Principe y Señor despues de sus dias: declarauan la historia los versos Latinos [texto en latín y francés] Como el prudente Rey Dauid Propheta diuino antes de su muerte hizo Rey â Salomon: assi el Emperador, cuya Virtud no tiene par, pone à su Hijo en su propio Imperio» [73].

  • Binche (22.08.1549): tras su recepción en Douay, Arras, Vapan, Cambray, Henao, Valencienes, Acanoe, Lamoresi, Avenas, Simay, Marimbruq y Biamonte, la comitiva llega el 22 de agosto a Binche, donde las recepciones de María de Hungría, hermana del Emperador y Gobernadora de los Países Bajos, dejan por un momento el mundo bíblico y giran hacia el mundo clásico y mitológico, con comparaciones con Hércules y Escipión el Africano, tras lo que se traduce el deseo de recordar a Carlos V su vinculación ideal con el Imperio Romano. En los aposentos del príncipe María había hecho instalar, para aleccionar al heredero, un ciclo de tapices sobre la batalla de Pavía. Tras dormir en el monasterio de Vitandal, pasa otra vez por Bruselas y sale hacia Malinas.

[70] Ibídem, pág. 117: «Estaua el tercer arco delos Españoles al cabo dela calle, la arquitectura era de forma toscana. Estaua en la ymagen de Dios padre, conla vna mano bendezia a dos estatuas de Reyes, que tenia ala mano derecha, que eran Dauid y Salomon, y con la otra mano apartaua de si alos que tenia a la mano yzquierda, que eran el Rey Baltasar con el sceptro quebrado, y el Rey Dario con el sceptro buelto hazia la tierra, y el Rey Alexandro Magno, que tenia el sceptro en muchas partes entre si diuidido, dando à entender quan inquietos y diuisos fueron los Imperios de aquellos tres Monarcas.»
[71] Ibídem, pág. 127v: «El vltimo espectaculo estaba junto a palacio y enla quadra d'el se representauan dos historias, al vn cabo de la quadra la d'el Rey David, y Salomón, como consu voluntad siendo ya muy viejo le jurabuan y recibian por su Señor y Rey los Tribus de Israel. Representauan este auto muchas donzellas muy galanas y ricas: estaba el Rey Dauid sentado y Salomon delante d'el en pie, y muchos de los Principes de Israel vestidos ala Iudaica, los quales dezian: AVDIIT OMNIS ISRAEL IVDICIVM, QVOD IVDICASSET REX, ET VNXERVNT REGEM, VIDENTES SAPIENTIAM DEI ESSE IN ILLO. Auiendo oydo todo el pueblo de Israel la sentencia y juyzio, que el Rey auia dado, y viendo que la sabiduria de Dios estaua enel y le acompañaua, por Rey le vngieron [...] Estaua debaxo de la cornija de la quadra esta letra, que daua à entender la historia, que alli se representaua. DAVID SENEX ET PLENVS DIERVM REGEM CONSTITVIT SALOMONEM FILIVM SVVM. El Rey Dauid viendose ya viejo lleno de dias ordenò, que su hijo Salomon fuesse Rey».
[72] Ibídem, pág. 137. En Lyla, en una nueva muestra de erudición bíblica, aparecen nuevos personajes en la historia de Salomón, como su hermano Adonías, por cuya conjura abdicó David en Salomón, el sacerdote Abiatar, que depuso Salomón nada más comenzar a reinar (I Re 2:26) y Joab, otro partidario de Adonías que ejecutó a continuación (I Re 2:34): «se representaba como Bersabe con muchos Principes suplicaua al rey Dauid, que su hijo Salomon fuesse Rey de Israel, y como por consentimiento y voluntad de Dauid era ungido por el Sacerdote Sadoch, y el Propheta Nathan con mucha alegria d'el pueblo estando presente Banajas hijo de Ioiada y otros muchos: y al cabo estaua hecho vn pequeño templo adonde se auia huydo Adonias, y mas adelante en vn pequeño palacio estaua Ioab y Abiathar y dos de los hijos de Dauid: y en vn cuadro pequeño estauan en Latin estos versos, qye Lyla al Principe dezia. EST ANIMVS MERITAS PRINCEPS TIBI DICERE LAVDES, HINC TVA ME VIRTVS REGEM SOLOMONA FERRERE FIRMATVM SOLYMIS POPVLO PLAVDENTE COEGIT, CVIVS VTEXAEQVAT CAESAR PIETATE PARENTEM, SIC NATVS NATI VESTIGIA SANCTA SEQVARE. QVOD QVIA SPONTE FACIS, NOSTRAS INTELLIGO VIRES EXIGVAS, NI COR SPECTES, MEMOREM VT TVA FACTA [texto en francés]».
[73] Ibídem, Tornay, págs. 150v, 151 y 153: «Don Carlos fue en su juuentud coronado por Rey de España [...] con valeroso animo y fuerça de armas tomò la villa de Dura, y ganò el Ducado de Gueldres [...] y ponía debaxo de su imperio ala potentissima y belicosa prouincia de Alemaña, prendiendo y rindiendo los mayores Principes d'ella [...] lo qual todo dauan a entender dos quadros vno de cada parte delante d'el theatro; tenia en Frances el vno d'ellos estos metros [texto en francés] Dauid siendo pastor, en su juuentud fue vngido por poderoso Rey de Israel d'el viejo Propheta Samuel, conquistò por su valor y proeza la ciudad de Rabbath, que florecia en honrra: catiuò los Illustres Principes d'ella, y vencio alos maluados hijos de Ammon y los sujetò y puso a todos debaxo de su imperio y obediencia, despojandolos de sus bienes: y assi con semejante gloria y alabada fama dio gracias a Dios Rey de Sion dela victoria, que d'ellos le auia dado […]representauan la historia, que ya otras ueces hauemos contado, como por ruegos de Bersabe el viejo rey Dauid, amonestado por el Propheta Nathan, hizo vngir y coronar por Rey de Israel a su hijo Salomon por el gran Sacerdote Sadoch. Estauan à vna parte dela quadra muy al natural hechas la fuente de Gihon y Bethlen ciudad d'el Rey Dauid, y cabe la fuente muy hermosas doncellas […] En vno de dos quadros, que pendian dél theatro, auia los siguientes metros: [texto en francés] Reynando en Iudea el Rey Dauid por voluntad de Dios, en quien tenía su Fè, ordenò que su hijo Salomon fuesse vngido por Rey de Israel, y assi lo hizo fin desampararlo, porque la tierra estuuiesse en paz, honrra y concordia, por donde el pueblo hizo alegrias con gran triunpho».
  • Amberes (11/19.09.1549): En el recibimiento de la llamada «Jerusalén del Norte» también aparecían numerosos personajes bíblicos en los magníficos arcos que construyó la ciudad. Calvete relata como el secretario del Senado de la ciudad, Cornelio Schryver «inventó todos los arcos y espectaculos», excepto los de los españoles y genoveses. Cornelio publicó ese mismo año un libro con los grabados de los arcos y descripciones de los mismos y de sus leyendas. En concreto, en el arco triunfal del Puente del Cordeliers, una hermosa dama aparece como símbolo de la Concordia con dos palomas en una mano y una cuerda trenzada con tres cordones, sobre la que Salomón señalaba la dificultad de romperla. [74]

[74] Ibídem, Anvers, pág. 221. Las ilustraciones y la cita de Salomón están tomados del libro que cita Calvete: C. Schryver, Le triumphe d'Anvers, págs. I ij-I iiij. «L'Arch triumphal publicque basty au Pont des Cordeliers» «CONCORDIA, ou Concorde, vne moult belle dame, portant en l'une de ſes mains, vne paire de tourterelles: et en laultre main, vne corde triplicee de trois cordons, au moien que Salomon (descripuant de concorde) dict, qu'vne coro de tripplicee eſt difficille a rompre
  • Rotterdam y La Haya (27/29.09.1549): la ruta pasa entonces por Berguen op Zoom (19.09), Breda (21.09), Oosterhout (22.09), Gorinchem (24.09), bajó por el Rhin a Drudreque (25.09), Rotterdam (27.09) y a Delft (28.09). Ese día duermen en La Haya, donde aparece dos veces el tema salomónico: «Vuo tres espectaculos desde la puerta hasta palacio sin letreros: en el primero representauan la historia de Dauid como matò a Golias, en el segundo se representaua, como siendo el biuo hazia jurar por Rey de Israel a su hijo Salomon».

  • Leiden (29/30.09): otra vez más se trata la sucesión en vida de David y la sabiduría de Salomón: «Estaua aquel theatro fundado entre dos espectaculos con mucho arte al'antigua, representauase enel primero por personajes biuos, como Salomon fue vngido por Rey de Israel, biuiendo el Rey Dauid su Padre, lo qual se entendia de vn cuadro, que pendia d'el architrabe, con estas palabras. EN SALOMON VNCTVS IN REGEM VIVIENTE PATRE. Veys aquí a Salomon vngido po Rey en vida de su Padre [...] Contenia el segundo espectaculo la historia y juizio, que Salomon dio entre las dos mujeres, que contendian sobre el niño biuo, diziendo cada vna ser su madre, d'el qual juycio resultò por la diuina Sabiduria, que en el Rey auia, que se conociesse claramente, qual delas dos era la verdadera madre: la letra era. SALOMON IVXTA SAPIENTIAM DEI RECTE IVDICAVIT. Salomon juzgò rectamente conforme a la gran sabiduria, que Dios le hauia infundido» [75].

  • Haarlem (30.09/1.10.1549): las mismas alusiones se hicieron en la siguiente escala, con una novedad: la aparición de la famosa Reina de Saba, que veremos una década después en las vidrieras de Sint Janskerk de Gouda y en la catedral de Gante: «quatro espectaculos de personajes biuos. Las historias que representaron, auemos muchas vezes dicho y contado: en el primero como Salomon fue vngido en Rey de Israel, y declarauase en Español con estos metros: Salomon por Rey es vngido / Enla vida del Padre suyo, / Porque de Dios fue escogido» [76].

  • Amsterdam (1/2.10.1549): el pueblo se alegra del heredero elegido por el Emperador: «Assi como en Israel con regozijo se alegrò, viendo a Salomon triunphando, al qual aun biuiendo el Padre le puso en su Real silla, por lo qual Israel con regozijo se alegrò y con alegria aprouò lo, que en esto auia ordenado Dauid, viendo al mancebo, que juzgaua bien: y assi como Israel con regozijo se alegrô de ver a Salomon triunphando, assi nosotros de ver reynar al Serenissimo Principe Don Phelippe» [77].

  • Bruselas (12.05.1550): tras pasar por Utrecht y otras importantes ciudades holandesas, en noviembre de 1549 la corte recala en Gante y Bruselas, donde se mantendría hasta 1551. En el libro de Cédula de dineros se incluye un pago por unos paños de tapicería con la Historia de Salomón a Hector Vueyns, cinco tapices viejos con la Historia de David y nada menos que siete paños y una antepuerta con otra Historia de Salomón de Juan Díez de Madrigal, tapicero mayor [78].

[75] J. C. Calvete, Felicissimo viaje, Haghe, pág. 282. Como muestra del tono erasmista que tuvo el viaje, en Rotterdam fue a recibirle un actor disfrazado como la estatua que la localidad había levantado a Erasmo con ropas de sacerdote con una pluma en una mano y unos versos en la otra para el Príncipe. Calvete era un humanista de formación erasmista, lo que aún no tenía las connotaciones negativas que tendría una década después. Eran buenos tiempos para las relaciones hispano-holandesas. Ibídem, Leiden, pág. 283v: «Contenia el segundo espectaculo la historia y juizio, que Salomon dio entre las dos mujeres, que contendian sobre el niño biuo, diziendo cada vna ser su madre, d'el qual juycio resultò por la diuina Sabiduria, que en el Rey auia, que se conociesse claramente, qual delas dos era la verdadera madre: la letra era. SALOMON IVXTA SAPIENTIAM DEI RECTE IVDICAVIT. Salomon juzgò rectamente conforme a la gran sabiduria, que Dios le hauia infundido».
[76] Ibídem, Haerlem, pág. 284: «En el otro se representaua, como hazia Salomon juntamente con el pueblo oracion a Dios suplicandole, que le diesse gracia, para que lo pudiesse gouernar con prudencia y discrecion, como en Español lo dezia. "Salomon haze oracion / A Dios para gouernar, / Su pueblo con discrecion". En el tercer espectaculo estaua el juycio de las madres sobre cuyo seria el niño biuo, con estos metros en Español. "De la primera sentencia, / Que Salomon auia dado / Por ser de gran prudencia, / Todo el mundo està admirado." En el prostrero, que estaua cerca de palacio, se representaua la historia de la Reyna Sabà, alli auia muchas donzellas galanas muy bien vestidas y hermosas: el verso en Español d'esto era. "La Reyna y otros Señores, / Van al Sabio Salomon, / Y le dan grandes loores"».
[77] Ibídem, pág. 288: «d'el primer paño pendia vn quadro, con estos versos [texto en latín]. Estaua contentissimo en tiempos passados el pueblo de Israel, de que el Rey Salomon couernasse los Reynos, que su Padre le auia encomendado, no menos nos deuemos alegrar agora nosotros con tan cierta esperança, de que vn tal principe ha de suceder al Emperador en el gouierno de sus Reynos.»
[78] «Los quales entregastes en Bruselas para [que] los lleve a España a Dª Leonor Mascareñas, aya del Infante mi hijo». Entrada del 12 de mayo 1550, en Bruselas. Incluye las órdenes de pago por servicios a la casa del príncipe en el período comprendido entre 1548 y 1554, Archivo de Simancas, cfr. F. Checa, Maravillas.

Espero no haber agotado al lector con estas muestras de «salomonismo», pero eran tan absolutamente directas y explícitas que me temo que era necesario citarlas todas para «sintonizar» con el humanismo biblista neerlandés. Un autor moderno, refiriéndose a las menciones a Salomón en el felicísimo viaje, viene a decir que no era para tanto y que en este viaje se citó también a muchos otros personajes además de los Reyes de Judá [79]. Lo segundo es cierto, pero de ninguna manera lo primero. Sí fue para tanto. Tanto, que Salomón y David acabaron flanqueando la entrada a la iglesia donde se enterraron Felipe II y Carlos V.

Como hemos visto, fue muy importante recordar cómo David había abdicado en el sabio Salomón, un hábil paralelismo que Carlos V usó para justificar ante sus cultos súbditos neerlandeses su abdicación a los cincuenta años en su heredero castellano: el príncipe Felipe estaba llamado a ser, con su gran prudencia, el gran pacificador que la cristiandad demandaba. Lo normal que el príncipe recogiera el mensaje y se viera a sí mismo como un nuevo y sabio Salomón.

El gran logro del rey bíblico había sido lograr la unión religiosa de sus dos pueblos, los israelitas del norte y los jebuseos del sur. Eran las mismas necesidades que tenía Felipe II ante la crisis religiosa que la Reforma había causado en el norte de Europa. Como veremos a continuación, durante esta década se sucederán los ejemplos del «salomonismo» del príncipe Felipe. Pero todavía le faltaba identificarse con la actividad constructora del rey bíblico. Como Salomón, pronto se daría cuenta del potencial unificador que tendría la construcción de un nuevo y grandioso templo [80].

[79] H. Kamen, Enigma, págs. 119-120: «durante su visita al norte de Europa el príncipe no solo fue comparado con Salomón, sino también con otras muchas figuras clásicas y bíblicas. Así, fue asimilado en repetidas ocasiones con la figura de Eneas descrita por Virgilio mientras cargaba a su padre en la espalda huyendo de las ruinas de Troya […] Además, se le comparó con Alejandro el Grande y Julio César, a pesar de que no había obtenido ninguna gloria militar. Siempre con respecto a la relación paterno-filial, fue asociado también con otras figuras bíblicas: Isaac, José y Tobías. Otro de los temas que se repitieron constantemente tiene relación con las columnas de Hércules […] es engañoso singularizar la cuestión en la figura de Salomón».
[80] H. Kamen (ibídem, pág. 120) señala que el salomonismo que rodeaba a Felipe II era una cuestión local de los Países Bajos y que en España no hubo ni una sola muestra del mismo: «las referencias acerca de Salomón se hallaban sin excepción limitadas a los Países Bajos, donde se hacían sobre todo dentro del contexto de la sucesión a la corona en dichas provincias. Estos paralelismos, además, se establecieron varios años antes de que Carlos V abdicase en favor de su hijo, y por tanto carecían de relevancia en los acontecimientos o circunstancias de España, donde a ningún escritor se le había ocurrido describir al príncipe como a un Salomón». Aparte de que veremos que esta última parte no es ni mucho menos cierta, no entiendo que tiene que ver con El Escorial la afirmación de que sea un hecho local. Como si Felipe II o Juan de Herrera no hubieran estado presentes personalmente en Flandes cuando ocurrieron y como si el rey hubiera estado allí de turismo quince días, no como señor natural de esas tierras cerca de una década. Eso sólo demuestra que el Humanismo había calado más en los Países Bajos que en España y que el rey llegó a España en 1559 con la idea de intentar recrear la arquitectura del Templo madurada en Flandes.